El salario mínimo reporta 40 años de rezago y, para resarcir la pérdida de su poder adquisitivo y detener el deterioro económico en que viven millones de familias, debe subir a 280 pesos diarios.
De hecho, cada familia mexicana requiere un ingreso mínimo de 10 mil pesos mensuales para comer, cubrir servicios básicos y costear el desarrollo integral de sus miembros.
José Luis de la Cruz, director del Instituto para el Desarrollo Industrial y el Crecimiento Económico (IDIC) explicó que el aumento del mínimo –de 73.04 a 80.04 pesos– para el próximo año es a todas luces insuficiente.
“Con un salario mínimo, los hogares apenas compran la cuarta parte de los productos y servicios que adquirían hace 40 años”, señaló el especialista.