La mañana de hoy jueves se generó en aguas del Mar Caribe la tormenta tropical “Nate”, el décimo cuarto sistema tropical de la actual temporada de ciclones en la cuenca del Atlántico, informó la Comisión Nacional del Agua (Conagua), a través del Centro Hidrometeorológico Regional de Mérida (CHRM) del Servicio Meteorológico Nacional (SMN).
“Nate” registra vientos máximos sostenidos de 65 kilómetros por hora (km/h) con rachas de hasta 85 km/h y se ubica a 700 kilómetros al sureste de las costas de Quintana Roo.
La tormenta tropical se movía con dirección Noroeste a 13 km/h y se ha establecido zona de vigilancia desde Punta Herrero, Quintana Roo, hasta Río Lagartos, Yucatán, y se prevé que se mantenga sobre la zona del Caribe durante los días siguientes.
Se recomienda a la población mantenerse al tanto de los avisos oficiales que se estarán emitiendo y de las recomendaciones que pudieran hacer las autoridades de protección civil de la región, debido a que “Nate” pudiera generar fuertes lluvias a su paso por la región en los siguientes días.
La depresión tropical número 16 evolucionó este jueves a las 7:15 de la mañana a la tormenta tropical “Nate”. Desde ayer miércoles, la Coordinación Estatal de Protección Civil informó que se activaba la Alerta Azul en Quintana Roo ante la proximidad de este sistema tropical.
Sigue Alerta Azul
En Quintana Roo se mantiene la Alerta Azul. La Conagua informó que se prevé que este sistema tropical incremente el potencial de lluvia en la Península de Yucatán.
Explicó que antes, al ser Depresión Tropical presentó vientos máximos sostenidos de 65 kilómetros por hora y rachas de 75 kilómetros por hora; avanzaba al Noroeste a 11 kilómetros por hora.
Pidió a la población a mantenerse muy al pendiente de los avisos oficiales y de los boletines que pudieran emitir las autoridades de Protección Civil en los tres estados de la Península de Yucatán.
Para los próximos días se prevé un incremento en el potencial de precipitaciones para toda la región, especialmente para viernes y sábado, por la presencia de una zona de inestabilidad que, aunque se encuentra en el Mar Caribe, se prevé afecte de manera directa a la Península de Yucatán.