En 1960 Adolfo López Mateos envío una carta abierta a la nación, pensando que quizá en un futuro sus palabras iban a tener un eco. Él pensaba en los políticos del futuro que desearan vender los recursos públicos del pueblo.
Estas palabras resultan premonitorias en el contexto actual y fueron pronunciadas el 27 de
septiembre de 1960, en la conmemoración de la consumación de la Independencia
Mexicana y en el marco de la devolución de la industria eléctrica a la nación mexicana.
Ya Lázaro Cárdenas del Río había proclamado “ni un paso atrás” al nacionalizar el petróleo.
Y López Mateos llamó a los mexicanos a desobedecer a los gobiernos que deseen entregar los recursos de la nación a intereses ajenos.
Aunque en su momento reconoció que México necesitaba apoyo tecnológico y asesoría extranjera para su industria del petróleo, advirtió que no era necesario que ningún inversionista se convirtiera en accionista de
las empresas de la nación.
“Solo un traidor entrega su país a los extranjeros.” Recordó que la constitución es clara al señalar que los recursos energéticos del país son propiedad exclusiva del pueblo. Qué diferencia con las acciones de Peña Nieto. No cabe duda que el PRI es cada vez más corrupto y cínico.
Escrito por: Alexander Garín Rojas