No es posible que el Fondo para Desastres Naturales en México tenga menos presupuesto que el otorgado a los partidos políticos en 2018.
Es inaudito que tengamos que estar limosneando dinero para los damnificados, cuando tenemos políticos que se han dedicado a robar con actos de corrupción.
A lo largo de la semana funcionarios públicos han hecho declaraciones en torno a los damnificados y los recientes desastres naturales que los colocan como una vergüenza nacional.
Esta es la realidad de México, dos millones de damnificados, miles de pérdidas materiales, frente a los exorbitantes sueldos que tienen funcionarios públicos.
