En el tema de salud del tercer debate presidencial, José Antonio Meade, candidato del PRI, propuso que los mexicanos puedan recibir atención médica de manera indistinta en el IMSS, el ISSSTE y el Seguro Popular y que el gobierno federal compense los gastos de esos tres sistemas.
Con esta propuesta, agregó, a la administración central le toca garantizar que los tres sistemas tengan 100% de abasto de medicamentos y equipos médicos y que puedan dar atención las 24 horas de los 365 días del año. “Ello implica una mejor administración y gestión de los recursos de los tres sistemas y lo vamos a hacer”, dijo.
En su intervención, el exsecretario de Hacienda defendió las “mejoras” que en los últimos años ha tenido el IMSS en materia de abasto de medicinas y procedimientos de atención.
También respaldó la operación del Seguro Popular –criticada por su competidor Andrés Manuel López Obrador–, al asegurar que atiende a 53 millones de mexicanos “de manera personalizada y lo podemos hacer mejor”.
Meade Kuribreña criticó que el tabasqueño ataque al Seguro Popular, “mientras se trae a su doctor de Miami cada 15 días”, en referencia a un médico cubano especialista en problemas de espalda que lo atiende, según se publicó en la prensa en días pasados.
En el tema de medio ambiente, el excanciller comentó que hay dos plantas nucleares en México con posibilidad de crecer. No obstante, pidió evaluar mejor las posibilidades para aprovechar las fuentes de energía solar y la eólica.
Como propuesta para combatir el cambio climático, mencionó la propuesta de modernizar el transporte público en 100 ciudades del país.
En el tercer y último segmento del debate, el aspirante del PRI aprovechó para lanzar ataques a su contendiente del PAN, Ricardo Anaya, al decir que es el único candidato que tiene una deuda penal con la justicia por acusaciones de corrupción.
De paso, pidió explicación a López Obrador sobre la presunta participación de Javier Jiménez Espriu –quien según ha dicho, sería su secretario de Comunicaciones y Transportes– en el caso Odebrecht.
Y volvió al ataque al criticar que en su administración al frente de la capital del país, no invirtió “ni un solo peso” en el mejoramiento del Metro ni hizo nada por tener una propia planta de reciclado de basura y otra de tratamiento de agua.