“Al valorar a la paciente, le impactó el tumor por diversas razones, la más importante era que se encontraba en una zona muy compleja, que tenía íntima relación con estructuras vitales, es decir el bazo y un riñón, órganos que estaban en riesgo al ser invadidos por las células anormales”, explicó el médico oncólogo Iván A. Delgadillo, quien integró al equipo médico que realizó la cirugía.

El procedimiento fue particularmente complicada, ya que al momento de retirar el tumor la paciente perdió 800 mililitros de sangre, lo cual fue atendido de manera inmediata, impidiendo complicaciones o que hubiera un desangrado de la mujer.

“Después de la valoración, la derechohabiente fue sometida a una laparotomía, es decir, se abrieron las paredes abdominales para explorar y proceder al retiro del tumor, que al ser extraído registró un peso de 17 kilogramos”, añadió el especialista.

Por su parte, la señora Rodríguez aseguró sentirse bien tras el procedimiento quirúrgico, sobre todo porque antes de éste su condición física y psicológica estaba muy mal, al grado de temer por su vida.

“Estaba muy triste al pensar que moriría sin que alguien pudiera ayudarla, porque ya había sido valorada con anterioridad y me pronosticaban un destino poco alentador, al no poder ser operada por la gran complejidad y tamaño del tumor. Pero en el Seguro Social encontré médicos capaces y comprometidos”, aseguró.

(Con información de elsoldetoluca)