La cancelación de esta compra se presentó como un ejemplo de la política de austeridad que va a llevar a cabo su gobierno, ya que dicha compra supondría un gasto de 1,200 millones dólares.
“Esa compra se va a cancelar porque no podemos hacer ese gasto”, afirmó en conferencia de prensa.
En abril, el Departamento de Estado dio el visto bueno a la venta de los helicópteros con el argumento de que mejorarían la seguridad de uno de sus socios estratégicos regionales y ayudarían a México en su combate contra el crimen organizado.
La oficina de asuntos políticos y militares del Departamento de Estado explicó en un correo electrónico que el periodo de 30 días de notificación al Congreso ya concluyó y que el siguiente paso sería que México envíe una carta de aceptación con los detalles de la compra que se gestionaría a través del Departamento de Defensa; señaló La Razón.
Ahora, los comentarios en el mismo sentido tienen lugar dos días antes del encuentro que el presidente electo tendrá con varios miembros del gabinete de Donald Trump, entre otros, el secretario de Estado, Michael Pompeo, y el asesor de la Casa Blanca y yerno del presidente, Jared Kushner.
Durante la campaña, López Obrador ya había criticado la compra de equipamiento militar e insistió en que su apuesta no era por la guerra y la carrera de las armas sino por la paz que vendría a partir de la justicia.