Enfatizó que no cometió ningún acto ilegal, y por ello hizo frente a la justicia

“Aunque haya cometido un error, he ofrecido disculpas y yo invito a la gente a que me mire con otros ojos”, expresó

René Bejarano, dirigente del Movimiento Nacional por la Esperanza, ofreció a los ciudadanos disculpas por el videoescándalo que protagonizó en 2004, en el que se le observa recibiendo grandes cantidades de dinero cuando era secretario particular de Andrés Manuel López Obrador.

En entrevista retomada por Nación 321, Bejarano reconoció que dicha situación fue un error que cometió, pero pidió que lo miren con otros ojos.

“Un error es como una herida profunda en el cuerpo, deja cicatriz, pero de ahí a estar abriendo la herida a cada momento y en cada circunstancia, pues eso ya es insano y ocurre permanentemente. No se puede decretar la muerte civil de nadie si además es declarado inocente jurídicamente, aunque haya cometido un error, he ofrecido disculpas y yo invito a la gente a que me mire con otros ojos”

Asimismo, anunció que pedirá el derecho al olvido, pero no de manera legal, sino para que los medios de comunicación dejen de recordar aquella filmación realizada hace 14 años, ya que, aseguró, todo fue una trampa.

“Hay una historia que hay que recuperar en síntesis, creo que la gente tiene que saber que hubo una conspiración encabezada por Carlos Salinas y Diego Fernández de Cevallos… Que me tendieron una trampa en la cual lamentablemente caí, que cometí un grave error. (La conspiración) estaba destinada a destruir la posibilidad de que Andrés Manuel López Obrador fuera presidente. Esa fue toda la trama”, afirmó.

Bejarano enfatizó que no cometió ningún acto ilegal, y por ello hizo frente a la justicia.

“Fui sometido a ocho procesos penales del fuero común y federal, a varias auditorías, fui exonerado en todas y pues yo invitaría a la sociedad a que analizara la vida antes de esos sucesos y la vida después de esos sucesos. No es solamente un error lo que debe determinar la actidud hacia una persona (..) Después de eso me pude reponer, rehacer, reorganizar, asumí las consecuencias. Han pasado casi 15 años y no puede pensarse que no tengo derecho a vivir o existir o aportar o desarrollar esfuerzos y a contribuir, analizar y canalizar”, relató.