La Selección Nacional Sub-21 tiene una cita con la historia mañana sábado cuando se enfrente a Inglaterra en la Final del Torneo Esperanzas de Toulon. Los mexicanos disputarán su segunda Final, mientras los ingleses llegan como experimentados en esta instancia y en busca del tricampeonato. Fue en el 2012 cuando se escribió el primer capítulo de éxito en el certamen y este 2018 una nueva generación puede incluso superar aquel logro.

El conjunto de Marco Antonio “Chima” Ruíz llega a la Gran Final como invicta, situación que no lograron los dirigidos por Luis Fernando Tena. Si bien aquella Selección marcó la pauta con jugadores de calidad como Marco Fabián, quien se convirtió en el primer jugador mexicano en ser campeón de goleo con siete tantos e igualó al inglés Alan Shearer, mañana Eduardo Aguirre puede romper dicha marca y ser el máximo romperredes de la competencia la juvenil.

Por si eso fuera poco, Diego Laínez, el futbolista más pequeño de Toulon con 17 años ha robado los reflectores con su calidad de juego que lo hace acreedor de las mejores críticas y es señalado como una auténtica revelación del Tri. En el mismo sendero van Roberto Alvarado y Uriel Antuna, ambos han sorprendido con su nivel y aportación dentro del campo.

Chima contará con prácticamente su alineación completa que fue la que disputó los tres Juegos de Fase de Grupos y la Semifinal, la única baja sería la del capitán y líder de la zaga azteca, César Montes, aunque hasta el momento el pronóstico de su lesión es reservado. En caso de confirmarse su ausencia, Joaquín Esquivel tomaría su lugar en la central.

Carlos Vargas, Jesús Sánchez y Gerardo Arteaga completan la defensa, Jonathan González y Alan Cervantes en el medio campo y José Hernández para resguardar la portería son los que forman la alineación nacional para detener a la generación, también prometedora, de Inglaterra.

Por su parte, el rival buscará la revancha luego de que fuera el mismo Tri quien mandó a la incertidumbre a los defensores del título al relegarlo como segundo lugar, tuvieron que esperar los resultados para conocer si accedían o no a la antesala de la Final. Lo lograron, ahora era Escocia el equipo a vencer para de nueva cuenta llegar a la cita con los mexicanos y hacer más prolongada la rivalidad que traen ya desde el Mundial Sub-20 del año pasado.