En Puebla la fiscalía estatal registró entre 2015 a 2016 la desaparición de 820 mujeres por lo que legisladoras del estado presentaron una iniciativa para instalar el mecanismo de búsqueda “Protocolo Alba”.

La diputada Geraldine González Cervantes presentó en el congreso estatal una iniciativa para que el gobierno de Puebla implemente el Protocolo Alba, que es un mecanismo especializado en la búsqueda y localización de mujeres y niñas reportadas como desaparecidas o extraviadas, único en México.

La activación de este instrumento responde a una demanda de las organizaciones defensoras de los derechos de las mujeres, quienes solicitaron en noviembre de 2017 la Alerta de Violencia de Género (AVG) por los hechos de desapariciones de mujeres y niñas en Puebla.

Una de estas agrupaciones peticionarias de la AVG, el Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio, alertó que urgían en Puebla mecanismos de búsqueda de mujeres efectivos, toda vez que la Fiscalía del estado seguía sin hallar a 300 poblanas de las 820 que se reportaron como desaparecidas entre 2015 y 2016.

En suma, la Fiscalía local reportó que de las 276 mujeres reportadas como desaparecidas en Puebla en 2017, sólo localizaron a 27, es decir, no sabe del paradero de 249 mujeres tan sólo de un año.

La situación es alarmante –destacaron las agrupaciones- sobre todo en Puebla que es un estado ubicado como “foco rojo” de la trata de mujeres con fines de explotación sexual, o bien, porque la desaparición de estas mujeres podría ligarse a casos de feminicidio.

Como resultado de estas denuncias el Grupo de Trabajo encargado de atender y dar seguimiento a la segunda petición de AVG en Puebla recomendó al gobierno local que instale el Protocolo Alba.

Por ello la legisladora del Partido Verde Ecologista, González Cervantes, presentó este mes la iniciativa en la que exhorta al gobierno del estado a iniciar el proceso de adopción del este mecanismo, toda vez que es fundamental para tener un sistema búsqueda de manera ordenada y coordinada durante las primeras horas en las que suceden las desapariciones.

Sin embargo, el Protocolo Alba es sólo parte de las demandas que han hecho las organizaciones civiles al gobierno de Puebla para investigar las desapariciones de mujeres; en la solicitud de Alerta de Género el Observatorio del Feminicidio exigió que se cree una unidad de análisis y contexto para la investigación de desaparición de mujeres y niñas, crear un grupo de investigación para que se revisen los expedientes en archivo o reserva de desapariciones de mujeres a efecto de realizar una investigación con perspectiva de género.

El Observatorio ha insistido que los altos números de desapariciones de mujeres en Puebla se mantienen por la omisión de parte del gobierno del estado, entre otras causas estructurales como la falta de procuración de justicia para las mismas.

No obstante, el Grupo de Trabajo no tomó en cuenta las peticiones de las organizaciones y únicamente recomendó al gobierno local instaurar el Protocolo Alba y cooperar con las autoridades del estado de Tlaxcala para erradicar la trata de mujeres y niñas.

PROTOCOLO ALBA SE EXPANDE EN EL PAÍS

El Protocolo Alba es un instrumento que en tres etapas establece con claridad los pasos que deben seguir los servidores públicos al recibir un reporte de extravío de una mujer, así como determinar si es de alto riesgo y cómo proceder de manera expedita para poner en práctica un operativo de alerta.

Hasta ahora, los proceso de AVG han hecho que cada vez más estados adopten el Protocolo como ocurrió recientemente en Colima y la Ciudad de México. Otras entidades que cuentan con este instrumento son Chihuahua, el Estado de México, Guerrero, Tabasco, Jalisco, Quintana Roo y Querétaro.