Alejandro aparentemente ingirió alcohol sin saber que esto podría costarle la vida al perder los estribos, ya que supuestamente se subió a la azotea de una vivienda generando molestia entre los vecinos, quienes solicitaron la presencia de los elementos policiales.
Eran cerca de las 18:00 cuando una unidad policial arribó al auxilio en San Miguel Totocuitlapilco, para detener al joven de 30 años y ponerlo a disposición de la agencia del Ministerio Público por supuesta alteración al orden.
Alejandro fue ingresado a los separos en Avenida Tecnológico, en estado etílico, de acuerdo con el médico que verificó su condición física; pese a contar con vigilancia, horas más tarde el cuerpo del joven fue encontrado sentado y atado a una barra de la celda con su camisa sobre el cuello.
De inmediato se requirió a personal de Protección Civil, pero sólo se confirmó que carecía de signos vitales, supuestamente él y otras personas era vigiladas cada 30 minutos como lo marca los lineamientos establecidos.
Sin embargo, el encargado fue puesto a disposición de las autoridades de la Fiscalía General de Justicía del Estado de México (FGJEM) para deslindar responsabilidades.