El ex boxeador Julio César Chávez admitió en su respuesta a la columna “El Campeón y el lavado de dinero” del periodista Ricardo Alemán, haber sido patrocinado por el extinto banco del Atlántico, propiedad del poderoso empresario sonorense Arcadio Valenzuela.
A pesar de que en la columna publicada por el diario El Universal no se menciona el nombre del banco en cuestión, fue el mismo ex pugilista quien admitió expresamente: “El Banco del Atlántico a mí me patrocinaba por cada pelea y yo hice un comercial para el Banco del Atlántico. Me pagaba muy buen dinero gracias a Dios, porque en ese entonces yo era el referente peleador mexicano”.
Asimismo, el “campeón” no reveló cuántas peleas le patrocinó la institución bancaria, ni cuánto fue el dinero que le pagó dicha institución financiera que en su momento fue profundamente investigada por presunto lavado de dinero del narcotráfico y el crimen organizado.
Según el expediente de la PGR 101/2007, Tomás Colsa Mcgregor, un testigo protegido de la PGR conocido como “El Joyero del Señor de Los Cielos”, fue quien señaló a Arcadio Valenzuela como prestanombres del narcotráfico y presunto lavador de dinero.
En su declaración, Colsa Mcgregor dijo que “en las oficinas centrales de Banpaís se realizaban las operaciones de lavado de dinero para Miguel Ángel Félix Gallardo”.
En numerosas investigaciones periodísticas se ha abordado la relación de Arcadio Valenzuela, como en la del investigador Luis Astorga quien en su libro “Vicios Públicos y Virtudes Privadas”, quien revela que el empresario también fue socio mayoritario de Banpacífico y que Félix Gallardo sería uno de sus mayores accionistas.
En el trabajo periodístico de Astorga también se revela que según investigaciones de la DEA, Arcadio Valenzuela habría manejado por durante décadas el dinero de varios traficantes como Caro Quintero y los hermanos Arellano Félix.