Facebook, la red social más utilizada del mundo con cerca de 1.500 millones de usuarios activos cada mes, un día fue una empresa pequeña, pero con un gran poder de seducción que provocaba que le saliesen ‘novias’ por todas partes. Cuando solo tenía cuatro meses de vida, muchas compañías más grandes llamaron a la puerta de su creador, Mark Zuckerberg, para hacer negocio. Sin embargo, lo que obtuvieron como respuesta fue un portazo.
Una de las primeras empresas interesadas en el negocio que Zuckerberg estaba levantando la realizó un inversor anónimo, en junio de 2004 (solo cuatro meses después de su creación), quien puso sobre la mesa 10 millones de dólares, según recoge el portal Business Insider del libroThe Facebook Effect, de David Kirkpatrick, una obra que cuenta los primeros tiempos de la empresa.
Friendster también intentó conquistar a la más guapa. Según unos documentos a los que ha tenido acceso BI, esta red social similar a Facebook, muerta desde el 14 de junio de 2015, intentó hacerse con los servicios de Zuckerberg, pero nunca ocurrió.
Google también llamó a su puerta. Mark Zuckerberg y su compañero de habitación de Harvard alquilaron una casa en Palo Alto. Poco tiempo después, “una pareja de ejecutivos de Google fueron a ver si había alguna manera de trabajar con ellos o si podían comprar TheFacebook [este fue el primer nombre de la red]”, escribe Kirkpatrick en el libro.
En marzo de 2005, Viacom soltó 75 millones de dólares sobre la mesa. Durante la primavera de 2005 (cuando aún conservaba el nombre de TheFacebook, Facebook habló en The Washington Post sobre un gran inversor, Viacom, un conglomerado de medios de comunicación. Esta empresa puso sobre la mesa 75 millones de dólares, una cantidad que le hubiese permitido a Mark Zuckerberg embolsarse en el acto 35 millones de dólares. Rechazaron la oferta y utilizaron elWashington Post para anunciar que habían dicho ‘no’ a Viacom y, de paso, ganar un poco más de prestigio.
MySpace, hoy olvidada, intentó comprar a su principal rival. En la primavera de 2005, el CEO de MySpace, Chris DeWolfe, quiso a Mark Zuckerberg y a su equipo para hablarles sobre una posible compra. Mark, el presidente de la firma, Sean Parker y el asesor Matt Cohler aceptaron acordar una cita, “pero solo porque DeWolfe les parecían un tipo interesante y porque sentían curiosidad acerca de MySpace”.
Medio año después, News Corp tuvo la misma idea. En enero de 2006, el entonces jefe del departamento digital de News Cor, Ross Levinsohn, llevó a Zuckerberg y a Cohler a Los Ángeles. Ross quería comprar TheFacebook, pero no estaba seguro del crecimiento de la compañía. “Esa es la diferencia entre una compañía de Los Ángeles y una de Silicon Valley. Nosotros construimos esto para durar y esos chicos [en referencia a MySpace] no tienen ni idea”, dijo Zuckerberg según The Facebook Effect.
En 2005, la NBC también mantuvo contactos con la red social. Kirkpatrick no da muchos detalles sobre este intento, pero aparentemente la NBC tantearon a la empresa en 2005.
En el verano de 2006, Yahoo empezó a pujar en serio: 1.000 millones por Facebook. Muchos inversores y ejecutivos de la empresa querían vender, pero estaban a punto de lanzar el News Feed, por lo que algunos, como Zuckerberg, pensaban que Facebook iba a valer más que esa cifra. Más tarde, Yahoo, después de haber presentado unos resultados trimestrales horribles, redujo su oferta a 850 millones. Menos dinero, más motivos para decir ‘no’.
AOL también pensó en desembolsar dinero para hacerse con Facebook. El CEO de esta empresa de servicios de internet con sede en Nueva York, Jonathan Miller, quiso comprar Facebook a mediados de 2006 por unos 1.000 millones de dólares.
Yahoo volvió a pinchar en hueso en 2006. Como se quedaron con las ganas, a finales de 2006 los chicos de Yahoo pusieron sobre la mesa de nuevo 1.000 millones de dólares… o más, si era necesario. Pero para aquel entonces, Facebook ya se había abierto a los estudiantes. Los nuevos registros bailaban entre los 20.000 y los 50.000 al día.
En 2007 un peso pesado entra en escena. Con el objetivo de robar Facebook a Google, que por aquel entonces volvía a seguir muy de cerca a la empresa, el CEO de Microsoft, Steve Ballmer fue muy claro: “¿Por qué no te compramos por 15.000 millones de dólares?”. Ballmer sabía que Zuckerberg en ese momento, por lo que el plan consistía en comprar una pequeña parte valorada en 15.000 millones y cada seis meses tenían la opción de comprar otro 5% más. De ese modo, tomarían el control de Facebook en cinco o seis años. Pero no, esto tampoco ocurrió jamás.