La investigación apunta a que Noemí sostenía relaciones con un médico y que la esposa de éste descubrió la infidelidad, por lo que se piensa que la mujer fue quien la asesinó
El pasado 1 de abril, pobladores del municipio Huaquechula, Puebla, encontraron los restos de Noemí Guadalupe Vergara Espinoza, de 20 años de edad, calcinados y con visibles huellas de tortura.
A la joven la localizaron desnuda y su cuerpo severamente herido, con golpes en cara, brazos y además le faltaba la pierna izquierda.
Al inicio de la investigación se desconocía de quién pertenecía el cuerpo, sin embargo familiares después corroboraron que los restos correspondían al de Noemí Guadalupe.
La investigación apunta a que Noemí sostenía relaciones con un médico y que la esposa de éste descubrió la infidelidad, por lo que se piensa que la mujer fue quien la asesinó.
La familia reportó a Noemí como desaparecida desde el 29 de marzo. Ese día la joven fue vista por última vez en un paradero del instituto Profesional de Terapias y Humanidades (IPETH) donde estudiaba y que se encuentra ubicado en la esquina de Periférico Ecológico y la intersección de bulevar Valsequillo, en la junta auxiliar San Francisco Totimehuacán.
La Fiscalía General del Estado investiga ya el caso aunque oficialmente no han proporcionado datos. Los familiares acusan que la dependencia se niega a entregarles el cadáver.
Con información del diario Zócalo de Saltillo