El Presidente destacó que se está poniendo especial atención a los jóvenes
El presidente Andrés Manuel López Obrador aseguró que los delincuentes no pueden ser considerados como monstruos, pues muchas de las personas que han tomado el camino de la delincuencia es debido a que se encuentran en la pobreza y desean cambiar su situación.
En conferencia mañanera, el mandatario sostuvo que su estrategia de seguridad continúa siendo en atender las causas que originan la violencia, generando más oportunidades de trabajo y apoyo. Además, confió en que, a pesar de pertenecer a cárteles o de cometer delitos de alto impacto, los criminales continúan teniendo un lado humano.
“Allí hay algo de consideración, de afecto, en el ser humano. Entonces por eso tenemos que buscar la reinserción, (evitar) la generalización, de no considerarlos monstruos, que ya no pueden ser recuperados. Además, todos tenemos derecho a la vida, pero sí, lo mejor es imprimir valores”, dijo.
Para reforzar su plan, López Obrador destacó que se está poniendo especial atención a los jóvenes, garantizando su derecho al estudio, al trabajo, a la movilidad, al progreso, y permitiendo que puedan ascender en la escala social; evitando que caigan en actos delictivo.
“El ser humano no es malo naturaleza, no nacimos malos, son las circunstancias las que llevan a muchos a tomar ese camino de las conductas antisociales. Porque no hay esperanza, no hay expectativas de poder salir de la pobreza, sus abuelos fueron pobres, sus padres fueron pobres, sus madres, y dicen ‘yo no quiero eso’, y algunos razonan de qué prefieren vivir poco, porque saben los riesgos que corren, que vivir de manera distinta”, remarcó.
Además, añadió que este tipo de conductas han aumentado debido a la influencia del modelo económico neoliberal que impone un estilo de vida consumista, donde lo más importante es lo material, y se pierden los valores culturales, morales y espirituales.
Aunque reconoció que su estrategia puede tomar más tiempo del deseado, es mejor iniciar con el cambio, en vez de optar por políticas que priorizan el uso de la fuerza, las cárceles y las medidas coercitivas.
“Se burlaban, y lo siguen haciendo, cuando sostuve que eran mejor los abrazos y no los balazos, y yo sostengo que lo mejor es atender las causas y llamar a todos a que nos ayuden, para que se den los cambios, a construir la paz. Se ha ido avanzando, poco a poco”, apuntó.
Por último, comentó que uno de los factores que ha ayudado a que su plan tenga resultados es que el gobierno ya no se asocie con la delincuencia, ya que de lo contrario “no hay remedio”. “Pero si está bien marcada la línea, la frontera, entonces es distinto, sí hay posibilidad para que las cosas cambien”, remarcó.