En Estados Unidos existe un clima de incertidumbre en el sector energético con respecto al futuro de sus inversiones en México, esto debido a la –cada vez mayor- posibilidad de que el candidato izquierdista Andrés Manuel López Obrador, según un artículo del New York Times.
De acuerdo al texto, firmado por el periodista Clifford Krauss, la industria energética de Estados Unidos teme la llegada del candidato de la coalición ‘Juntos Haremos Historia’ debido a que en el pasado ha manifestado su rechazo a las reformas estructurales del actual gobierno, entre las que se encuentra la energética.
A pesar de que el actual presidente de Estados Unidos, Donald J. Trump, ha manifestado en múltiples ocasiones lo injusto que el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) ha sido para su país, los números muestran que en realidad ha sido muy ventajoso, y eso incluye al sector energético.
A partir de la aplicación de la Reforma Energética en el año 2013, la empresas energéticas estadounidenses han generado un superávit de 15 mil millones de dólares con respecto a México en lo que se refiere a compra y venta de productos petrolíferos.
Esto también le ha permitido a las empresas estadounidenses tener una sobreproducción de estos productos, lo cual permite que los precios en Estados Unidos se mantengan muy bajos.
Pero ahora, los empresarios temen que la llegada de López Obrador a la Presidencia termine con la bonanza petrolera, ya que entre sus propuestas de campaña se encuentra la construcción de dos refinerías propias para procesar el petróleo extraído por Pemex y poder bajar los precios de la gasolina en México.
Paul Krugman, Premio Nobel de Economía 2008, expresó hace unos meses que los medios en Estados Unidos ven a López Obrador como un peligroso radical, y la industria del petróleo parece tener la misma percepción en estos momentos.
Sin embargo, durante las últimas semanas, el propio López Obrador ha manifestado que no buscará echar atrás de lleno las reformas impulsadas por la actual administración, incluyendo la energética, y que se buscará mantener en la medida de lo posible el TLCAN.
En caso de que el tabasqueño gane las elecciones, se verá en los próximos meses si las afirmaciones de Krugman son ciertas, y confirma su diagnóstico de que es mejor gobernante de lo que -de momento- piensan en Estados Unidos.
Con información del New York Times.
