El fin de semana un grupo de cinco estudiantes de universidades privadas golpearon a cinco mujeres en un bar en la zona de Angelópolis hasta fracturarle la nariz a una de ellas.
En el bar “El Costeñito”, ubicado en la zona de Angelópolis, cinco mujeres fueron golpeadas por un grupo de supuestos estudiantes de la UDLAP y UPAEP, dos de las universidades privadas con más reconocimiento en Puebla.
El caso se dio a conocer por una publicación de Facebook de una de las afectadas, Samantha Solís, donde relató los hechos y denunció la impunidad que reinó.
La joven informó que los juniors que presuntamente estudian en universidades privadas fueron detenidos por policías municipales de San Andrés Cholula, a bordo de la patrulla UAH–53–62–, pero minutos después liberados.
Los presuntos agresores fueron identificados como Christian y Sebastián Z, Kelly G, Juan Carlos C y Esteban O.
En 2015, en el estado de Veracruz salió a la luz pública, a través de las redes sociales, una serie de abusos cometidos contra mujeres Columba, Melissa y Daphne y una estudiante del Conalep, incluido violaciones sexuales, cometido por un grupo de jóvenes adinerados y protegidos por sus influencias, apodado los Porkys.
En el caso de Puebla, se trata de cinco presuntos estudiantes de la Universidad de las Américas Puebla (Udlap), y de la Universidad Autónoma Popular del Estado de Puebla (Upaep), sin que hasta el momento ambas instituciones hayan fijado una postura al respecto.
Samantha evidenció a los cinco agresores en una videograbación que compartió en la red social, donde reclamaron a los agentes por qué fueron soltados.
Los hechos ocurrieron el pasado viernes 7 de octubre en el bar señalado, donde Samantha Solís se encontraba con un grupo de amigas, cuando sin motivo alguno comenzaron a ser golpeadas por cinco universitarios.
La agresión ocurrió sin que nadie pudiera ayudarlas, en presencia incluso de meseros y empleados del bar “El Costeñito”, mientras los provocadores continuaron por varios minutos afuera del establecimiento.
De acuerdo con el relato de Samantha, agentes de la Secretaría de Seguridad Pública y Tránsito Municipal de Puebla arribaron al lugar para presuntamente arrestar a los jóvenes y remitirlos a la autoridad judicial.
Pero al final –condenó– que la Policía local liberara a los juniors a pesar que fueron detenidos en flagrancia.
Por esta razón, Samantha Solís decidió realizar la denuncia a través de la red social para evidenciar a sus agresores y evitar que otras mujeres resulten agredidas.
En la videograbación se escucha como las jóvenes encaran a los policías municipales que den a conocer los nombres de los agresores, para que se interpongan las denuncias en su contra.
Asimismo, la principal agredida fue trasladada a un hospital de la zona de Angelópolis.