En lo que va del año, el desabasto de gasolina en el Valle de Toluca ha generado pérdidas económicas de 20 millones de pesos para las 193 estaciones de servicio ubicadas en los 14 municipios afectados, de las cuales, hasta este domingo han cerrado 70 por la falta de combustible, informó Juan Felipe Chemor, presidente de la Cámara Nacional de Comercio (Canaco) en la zona.

 

En entrevista, el líder empresarial precisó que hasta este domingo, cien estaciones no tenían gasolina Magna, 133 Premium, y alrededor de 60 no contaban con diesel.

 

“Cuando tengan más producto empezarán a racionalizar para que más gente tenga posibilidades de moverse. Pero, este lunes que empieza la actividad más fuerte es lo más preocupante”.

 

Por separado, el presidente de la Asociación de Distribuidores de Gasolina y Lubricantes del Estado de México (ADIGAL), Jorge Luis Pedraza Navarrete, descartó que el problema sea de acaparamiento de gasolina o aumento de precios; sino por un tema de logística de Petróleos Mexicanos (PEMEX).

 

Durante el fin semana, en las gasolineras de la región se observaron largas filas de automovilistas; pero el problema podría agudizarse a partir de este lunes con el regreso a clases, reconocieron los empresarios.

 

El presidente de ADIGAL explicó que desde el 31 se diciembre registraron una intermitencia en el suministro en la Central de Distribución de Pemex en Toluca y para el dos de enero una suspensión total.

 

Las estaciones de servicio en la región tienen que ir a cargar combustible hasta Tula, Hidalgo y Acapulco, Guerrero, donde el proceso es muy lento, porque también acuden gasolineras de Guanajuato, Guadalajara, Querétaro y Michoacán.

 

Destacó que Pemex, les informó que se buscará una solución inmediata del problema, pero no precisó la causa, ni tampoco la fecha en la que se contará con suministro suficiente. Por lo pronto, dijo que la gente se ha preparado llenando sus tanques y descartó problemas mayores.

 

Pedraza Navarrete señaló que cada estación de servicio cierra se tienen pérdidas económicas de hasta 50 mil pesos por día, debido a que los salarios se tienen que seguir pagando. Además de los gastos adicionales de enviar las pipas por el combustible hasta Tula y Acapulco.