La crueldad no conoce límites. Las desapariciones, secuestros y homicidios en el Estado de México son el pan de cada día. Mientras tanto, los delincuentes no sufren ni se acongojan para poder ocultar sus crímenes, al contrario parece que disfrutan de exhibir sus fechorías.

El Gran Canal de Ecatepec, ha sido testigo de varias desgracias: inundaciones, ahogados y también sirvió de fosa clandestina o depósito para restos humanos.

 

Por ser un lugar de mal olor y oscuro, la gente que habita cerca de las inmediaciones del Canal, lo evitan. Muchos sabían de los delincuentes que se escondían sus oscuros secretos ahí. No fue sino hasta el 2014 cuando las autoridades se toparon con un escalofriante hallazgo: al menos 21 cuerpos fueron encontrados  durante el desagüe del Canal. De estos restos, 16 eran de mujeres menores de edad.

Entre estas infortunadas, se encontraba Diana Angélica Castañeda Fuentes, una menor de tan sólo 14 años y que fue reportada como desaparecida desde el 7 de septiembre del 2013.

 

Así como Diana, otras 15 menores se hundieron en la misma desgracia. Hasta el día de hoy, hay quienes afirman que en realidad no encontraron 21 cuerpos, sino que eran 45. La realidad es que los criminales siguen cometiendo barbaridades y no hay quién los detenga.