Un joven de secundaria en Ciudad Obregón quiso participar en un concurso de fotografía de parejas. La dinámica consistía en tomarse una foto con una compañera de clases, y ver quién obtenía el mayor número de reacciones en redes sociales siendo el premio un boleto al cine, hecho que ilusionó a Luis, pero, pese a que intentó conseguir una foto con alguna compañera, todas lo rechazaron por tener un problema de lenguaje que limitaba su comunicación.

En caso de ganar, Luis pensaba llevar a su mamá al cine ya que son una familia de escasos recursos, y nunca habían visto una película en la pantalla grande.

Fue entonces que él le contó a su maestra, de nombre Michelle, que no participaría en dicho concurso porque nadie había querido tomarse una foto con él, por lo que al escuchar esto, ella decidió ir al rescate de Luis y participar tomándose una foto con él, sin pensar que esta acción los volvería virales en las redes sociales.