A días de la elección intermedia, Citibanamex presentó una encuesta de vivienda que refleja la incapacidad de la coalición formada por el PAN-PRI y PRD para arrebatarle la fuerza política a Morena, quien se lleva el 46% de la intención de voto, según este sondeo.
Los datos presentados por esta institución financiera reflejan que el PAN es el segundo partido elegido por el 17% de los participantes, en tanto que el PRI por el 15. Por su parte, el PRD, PVEM y Movimiento Ciudadano tienen, cada uno, el 5% de aprobación. El Partido del Trabajo resulta el menos favorecido con el 3%.
Con esta información concluyen que Morena se mantiene como el partido político más fuerte en tanto que la coalición opositora “no es suficientemente competitiva como para arrebatarle a Morena y sus aliados el control mayoritario de la Cámara de Diputados”, explicando que, si bien la estrategia fue la unión, “es posible que algunos simpatizantes priistas, panistas o perredistas vean diferencias irreconciliables entre los integrantes de la coalición”, lo que desmotiva el voto.
En contraparte, el partido fundado por López Obrador mantiene una mejor imagen al ser vinculado como un partido relacionado estrechamente con la gente y el combate a la corrupción. “37% de la población declara ser beneficiario de programas sociales federales y la mayoría de ellos dice que votarán por Morena”, declara el estudio. Además, si bien la popularidad del presidente ha ido a la baja, aún mantiene una popularidad del 64%.
Este sondeo, realizado entre el 29 de abril y el 5 de mayo, revela otros factores que favorecen al partido presidencial. Uno de ellos, es que una mayoría ve probable que la economía y la seguridad pública mejoren al final del mandato de López Obrador. En términos económicos es una percepción que también ha sido revisada al alza por los expertos financieros, que ahora se acercan más a una proyección de 6% al cierre del año.
Un tema que ha sido controversial y generalmente arropado por sus opositores es el energético. Sin embargo, sus efectos parecieran ocupar menor atención y preocupación entre la población encuestada, que presenta una visión más favorable sobre la idea de que la industria energética se nacionalice. En ese sentido, las reformas de hidrocarburos y a la industria eléctrica son evaluadas de manera positiva.
Cabe recordar que éstas han generado fuerte rechazo entre los empresarios del sector, por lo que, apenas entraron en vigor, el gobierno enfrentó una lluvia de amparos que finalmente fue atendida por dos jueces, quienes mantienen suspendidas amabas iniciativas de manera provisional. El tema pasará a la Suprema Corte de Justicia de la Nación o podría llevar a una reforma a la Constitución, como ha señalado el propio presidente.
