Retención de mercancía, cobranza ilegítima, así como el cobro de mercancía que nunca fue entregada, son algunas de las irregularidades y delitos de los que se acusa a los responsables de la tienda Elektra de la colonia Las Águilas, en este municipio.

A través de una denuncia anónima, clientes de esta tienda ubicada en Avenida 6 y calle 5, en la mencionada colonia, afirmaron ser víctimas de una serie de irregularidades y delitos que esta tienda comete en el proceso de compra-venta y durante la cobranza de los mismos productos.

El pasado diciembre de 2014, un cliente de la tienda, adquirió algunos productos, cuyo valor total ascendía a los 11,000 pesos, y cuya entrega estaba pactada para los siguientes días en su propio domicilio; si embargo, esta mercancía nunca llegó.

Posteriormente, el desconcertado cliente acudió a la tienda para preguntar el estatus de su entrega, solo para recibir la noticia de que ya había sido entregada, cosa que no ocurrió; sin embargo, a pesar de que solicitó a una persona, la cual cree que es supervisora o jefa de piso, de nombre Alejandra Vargas, así como al gerente identificado como Nesi Carbajal, le mostrara la documentación que refería dicha entrega, o el registro biométrico de la huella digital, que es con la que se registran los clientes, solicitud que negaron.

Al paso de los meses, el cliente comenzó a recibir las solicitudes de cobranza de la tienda, por lo que comenzó a realizar los pagos, con la idea de que solo se trataba de un mal entendido o un error administrativo.

Al paso de los meses, cobradores se presentaron en su domicilio en repetidas ocasiones, sin que la mercancía llegara a su casa.

“Empecé a pagar antes de recibir la mercancía por temor a que estuvieran viniendo a mi casa y a que me reportaran en Buró de Crédito”, afirmó la persona afectada.

Fue hasta a finales del año pasado, que autoridades de cobranza de la misma tienda, apoyaron a los clientes en sus justificadas quejas; incluso comentaron que hubo otro caso, donde un cliente llevó su celular comprado en la tienda para servicio técnico, pero nunca se lo regresaron; sin embargo, afirmaron que el teléfono estaba siendo usado por el mismo gerente de la tienda.

Los denunciantes están por acudir a instancias mayores para recuperar sus bienes o su dinero, así como solicitar una auditoría y supervisión superior a esta tienda, que lleva varios años operando bajo este modo y que al parecer tiene a varios clientes en esta situación.